Los motivos de las conductas surgen de la propia persona o provienen de elementos externos al individuo. Así, se habla de dos tipos de motivaciones:
- Motivación interna, también llamada motivación intrínseca. Para esta motivación no es necesaria ninguna necesidad ni elemento de recompensa externa, hay una motivación expontánea, fruto de nuestra voluntad sin necesidad de un elemento exterior. Esta motivación interna puede ser provocada por el placer, la curiosidad, lo imprevisible, etc. Éstas motivaciones funcionan mejor si existe un equilibrio entre la conducta o tarea y la competencia personal al efectuar dicha actividad. Estas motivaciones son las que mejor funcionan porque dependen únicamente de uno mismo y están relacionadas con la propia voluntad.
- Motivación externa, también llamada extrínseca. Provienen del entorno de la persona. Son motivaciones que funcionan siempre obteniendo una recompensa tras la conducta, pero son inestables porque siempre dependen de la recompensa, si esta desaparece, desaparecerá la motivación.
- Motivaciones intrínsecas y extrínsecas, llamadas motivaciones mixtas, pueden existir a la vez, pueden existir motivaciones personales que se complementen con motivaciones sociales